
No sólo de discos vive el hombre. Por eso, desde aqui reccomendamos esta novela por la que Cormac McCarthy recibió el premio Pullitzer.
Pego algunos extractos de criticas (que vago estoy esta mañana):
Hacía mucho tiempo que no ya un libro, sino algo, cualquier cosa, me emocionaba de una manera tan intensa como lo ha hecho “La carretera”. No he dejado de temblar mientras lo leía. Reconozco que he llorado cada vez que el hombre observa a su hijo dormido y se pregunta si llegado el momento tendrá fuerzas para matarlo, si podrá escoger entre dispararle o aplastar su cabeza con una piedra. He llorado cada vez que el hombre implora a Dios sin obtener respuesta, cada vez que se confiesa incapaz de imaginar pensamientos sobre la belleza o la bondad. He llorado cuando el hombre entrega el revolver a su hijo y le explica cómo saltarse la tapa de los sesos… Si te encuentran vas a tener que hacerlo. ¿Entiendes? Chsss… Nada de llorar. ¿Me oyes? Ya sabes cómo hacerlo. Te la metes en la boca y apuntas hacia arriba.
Lean La carretera, dos veces si es preciso (es un libro de poco más de doscientas páginas, de lectura fácil, aunque en ciertos momentos tan áspera y cruda que hay que hacer un alto y tomar aire) porque se trata de una obra literaria impresionante, de una expresividad y riqueza mayúsculas, destinada a convertirse en todo un clásico moderno.